lunes, 30 de julio de 2007

VINAGRE DE MANZANA




VINAGRE DE MANZANA natural del valle de san antonio cañete peru


COMO PODEMOS HACERLO EN CASA?
1. ELABORAR EL ZUMO
Sólo las manzanas más dulces y sin golpes ni rastro de moho ni podredumbre son las más indicadas. Si es posible deben ser de origen ecológico o deben estar muy limpias a fin de que ningún producto químico estropee la fermentación posterior.
Lavarlas a conciencia, es, pues imprescindible.
Usaremos la pulpa de la manzana, sin piel, rabo ni corazón.

2. OBTENER EL MOSTO
Pondremos el zumo (un litro más o menos) dentro de una envase de cristal o barro lo más ancho posible y solo lo hemos de llenar hasta la mitad, a fin de que haya buena fermentación.
Lo taparemos con un globo a fin de que no entre oxígeno y en cambio los gases de la fermentación puedan expandirse.
La temperatura debe de oscilar entre 18-20 ºC y hemos de esperar entre 4 y 6 semanas.
Menor o mayor temperatura puede estropear la fermentación.
El dulzor de las manzanas es clave así si son ácidas deberás añadirse un poco de azúcar (a más azúcar mayor graduación alcohólica).
Si dejamos algún trocito de piel de manzana en el zumo la fermentación es más rápida.
Antes de pasar al siguiente paso, que es la transformación en vinagre, hemos de verter el mosto en otro recipiente cuidando de no aprovechar el poso del fondo del mosto. Este poso es el que nos avisa que el mosto ya está listo y que hay que retirarlo.

Ahora pondremos el mosto en un recipiente ancho y lo colocaremos en un lugar cálido, bien cerca de una estufa, un radiador o en una ventana donde de el sol, durante tres días, en reposo y cubierto con un paño limpio.
Una vez pasados estos tres días hemos de destapar el recipiente e intente que mantenga unos 20ºC constantemente (su es un poco mejor).
Hay que evitar los cambios bruscos de temperatura y la exposición a la luz directa.
( Es mejor hacer esta parte oscuro).




Hemos de remover el contenido (vital para que se oxigene) una vez al día muy
cuidadosamente ya que la capita de fermento que aparecerá en la superficie no debe romperse ni hundirse (para que no mueran las bacterias que fermentan).
Este proceso suele durar entre uno y dos meses. Algunas personas y por supuesto la mayoría de las empresas insuflan aire a la parte baja del mosto para acelerar el proceso ya que a más oxígeno más rápido se fabrica el vinagre.
Finalmente filtraremos el vinagre y lo embotellaremos en una botella lo más oscura
posible ya que la luz solar hace que se estropee antes (ahora tenemos un vinagre sin refinar y sin conservantes químicos, con todas sus propiedades medicinales pero más frágil).


¿Sabías qué…?






El buen vinagre de manzana no está refinado y si no los ponemos a la nevera suelen crear al cabo de unos días, una especie de velo en el interior, que es poco agradable. Lo podemos filtrar y continúa siendo bueno para tomar.


El vinagre de manzana debe guardarse en la nevera (heladera, refrigerador) ya que sino sale como una telita que parece seda que flota en su interior. No indica que se haya estropeado pero es desagradable de ver y dificulta su aprovechamiento.

Hay que tener en cuenta que:
Si nos sale demasiado fuerte indica que si graduación alcohólica es demasiado alta. La próxima vez hemos de añadirle menos azúcar al zumo para hacer el mosto o diluir el mosto (una de mosto por una de agua) cuando vamos a convertir en vinagre.


: hacer siempre la primera la primera prueba con poca cantidad (un litro de zumo de manzana) e ir anotando exactamente cada paso que vas haciendo (tiempo, temperatura, cantidad, etc.).

Así la próxima vez puedes modificar o no alguna
parte del proceso.


Como normal, lo ideal es una cucharadita de las de postre de vinagre de manzana, en medio vaso de agua con una cucharadita de algún endulzante como la miel, Lo podemos tomar antes de las tres comidas principales. A veces hay que adecuar la dosis de vinagre de manzana a nuestro organismo (hay personas que se sienten mejor poniendo menos vinagre o tomándolo solo una o dos veces al día.

Otras notan una mejor digestión tomándolo después de las comidas.

domingo, 29 de julio de 2007

SANTA CRUZ DE FLORES




El distrito de Santa Cruz de Flores es uno de los dieciséis que conforman la provincia peruana de Cañete que conforma el Departamento de Lima, en la Región Lima.
Creado como distrito el
27 de diciembre de 1922, ya que antes conformaba el distrito de Mala. Se ubica a una hora al sur de la ciudad de Lima.
Es uno de los distritos cañetanos con mayores atractivos en sus paisajes, ambientes campestres y fértiles tierras productora de una diversidad de
frutas. Un buen ejemplo es el caserío de San Vicente de Azpitía, llamado el "Balcón del cielo", pues desde allí se tiene una buena vista del valle de Mala, se caracteriza por su excepcional producción vitivinícola.

El valle de San Antonio


El distrito de San Antonio es uno de los dieciséis que conforman la provincia peruana de Cañete en la Región Lima.
Fue creado como distrito el 27 de diciembre de 1922, ya que antes conformaba el distrito de Mala. Su capital, San Antonio, está ubicada a 84 km al sur de Lima, al margen derecho del río Mala y cuenta con una población de 3.221 habitantes.
Sus mayores atractivos son la concurrida playa León Dormido y la zona ecológica Pantanos de Puerto Viejo. Tiene una variada producción de frutas, entre las que sobresalen las manzanas de la variedad Delicia. Su patrón es San Antonio de Padua.